Qué es un curetaje dental y cómo se realiza

Las enfermedades periodontales, como la gingivitis o la periodontitis, no solo afectan a tus encías, sino que pueden aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, diabetes y otros problemas de salud. La buena noticia es que puedes prevenir y combatir estas enfermedades con un procedimiento sencillo y efectivo: el curetaje dental.

¿Qué es un curetaje dental y para qué sirve?

Las bacterias que se esconden bajo tus encías pueden poner en riesgo tu sonrisa.

El curetaje dental, también conocido como raspado y alisado radicular, es un tratamiento odontológico que te ayuda a combatirlas y mantener una sonrisa sana y radiante.

Este tratamiento odontológico tiene como objetivo eliminar el sarro y las bacterias acumuladas por debajo de la línea de las encías, en las bolsas periodontales.

Estas bacterias, si no se eliminan, pueden causar inflamación, sangrado e incluso la pérdida de dientes.

¿Cómo se hace un curetaje dental?

El curetaje dental se realiza bajo anestesia local, por lo que no es doloroso.

El procedimiento se realiza en dos o tres sesiones, bajo anestesia local, y no requiere de tiempo de recuperación. En cada sesión, el periodoncista limpia una zona de la boca de forma precisa y segura.

Se realiza con instrumentos específicos, llamados curetas, que permiten eliminar el sarro y las bacterias de forma precisa y eficaz.

La enfermedad periodontal, si no se trata a tiempo, puede avanzar a una etapa más grave donde métodos como la limpieza dental profesional ya no son suficientes.

En estos casos, el curetaje dental se convierte en la mejor opción para salvar tus dientes y tu sonrisa.

¿Cómo saber si necesitas un curetaje dental?

La enfermedad periodontal, si no se trata a tiempo, puede avanzar a una etapa más grave dónde métodos como la limpieza dental profesional ya no son suficientes. En estos casos, el curetaje dental se convierte en la mejor opción para salvar tus dientes.

Te recomendamos que prestes atención a estas señales:

• Encías inflamadas y sangrantes: enrojecimiento, brillo, dolor al tacto, sangrado al cepillarse o al usar hilo dental.
• Enrojecimiento intenso: las encías pueden adquirir un tono rojo oscuro o púrpura, tanto generalizado como en zonas específicas.
• Retracción de las encías: observa si ves tus ‘‘dientes más largos’’. Es decir, si la línea de las encías se ve más alta de lo normal, exponiendo las raíces de los dientes.
• Pus en las bolsas periodontales: secreción purulenta al presionar las encías, mal aliento persistente y sabor metálico en la boca.
• Movilidad de los dientes: dientes flojos o que se mueven al tocarlos, aparición de espacios entre dientes y dificultad para morder o masticar.

¡Recuerda!

Ten en cuenta que no todas las personas que presentan estos síntomas requieren un curetaje dental. Un dentista profesional, especialista en tratamientos de encías, debe ser quien evalúe tu caso particular y te recomiende el tratamiento más adecuado para ti.

Factores que aumentan la probabilidad de necesitar un curetaje dental

Más allá de los signos evidentes de enfermedad periodontal, como la inflamación, el enrojecimiento y la movilidad de las encías, existen otros factores que pueden aumentar la probabilidad de requerir un curetaje dental.

A continuación, mostramos algunos de los factores que aumentan la posibilidad de requerir un curetaje:

• Fumar: El tabaco es un enemigo acérrimo de las encías. La nicotina reduce el flujo sanguíneo, debilitando su capacidad para combatir las bacterias. Los fumadores son más propensos a sufrir periodontitis crónica y a que, esta, avance con mayor rapidez.
• Diabetes: Cuando la diabetes no se controla adecuadamente, aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades periodontales. La diabetes afecta al sistema inmunológico, dificultando la respuesta del cuerpo a las infecciones bacterianas en las encías. Además, la periodontitis puede dificultar el control glucémico en personas con diabetes.
• Embarazo: Los cambios hormonales durante el embarazo pueden aumentar la susceptibilidad a la gingivitis y la periodontitis. La gingivitis del embarazo, que afecta a hasta el 80% de las mujeres embarazadas, puede progresar a periodontitis si no se trata.
• Malos hábitos de higiene bucodental: La placa bacteriana, principal causante de la enfermedad periodontal, se acumula si no se realiza una correcta higiene bucal. Cepillarse dos veces al día, usar hilo dental una vez al día y visitar al dentista para limpiezas regulares son medidas esenciales para prevenirla.
• Enfermedades sistémicas: Algunas enfermedades como la artritis reumatoide o la osteoporosis pueden aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades periodontales. Informar a tu dentista sobre cualquier enfermedad sistémica que tengas es fundamental para que pueda adaptar tu tratamiento periodontal.

Si presentas alguno de los signos o factores de riesgo mencionados, es fundamental que visites a tu dentista lo antes posible para que pueda evaluar tu caso y determinar si necesitas un curetaje dental.

¡Recuerda!

– Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado son cruciales para prevenir la progresión de la enfermedad periodontal y la pérdida de dientes.

– Mantén una buena higiene bucodental y visita a tu dentista regularmente para reducir la probabilidad de necesitar un curetaje dental.

Beneficios del tratamiento de encías

El curetaje dental te ofrece una serie de beneficios que te ayudarán a mantener una sonrisa saludable y fuerte. A continuación, mostramos los beneficios del curetaje en la boca:

• Eliminación profunda del sarro y las bacterias: El curetaje elimina el sarro y las bacterias acumuladas por debajo de la línea de las encías, incluso en las bolsas periodontales, donde el cepillado y el hilo dental no alcanzan. Esta limpieza profunda previene la inflamación y la infección, protegiendo tus dientes y encías.
• Reducción de la inflamación y el sangrado: Al eliminar las bacterias que causan la enfermedad periodontal, el curetaje reduce la inflamación y el sangrado de las encías. Esto te permite disfrutar de una boca más sana y una sonrisa más agradable.
• Prevención de la pérdida de dientes: La enfermedad periodontal no tratada puede provocar la pérdida de dientes. El curetaje dental, al eliminar la infección y controlar la enfermedad, te ayuda a prevenir la pérdida de dientes y mantener una sonrisa completa.
• Mejora de la salud bucodental en general: Un curetaje dental no solo beneficia a tus dientes y encías, sino que también mejora tu salud bucodental en general. Al reducir la placa bacteriana y la inflamación, se reduce el riesgo de otras enfermedades como la caries dental o las enfermedades cardíacas.

Es decir, el curetaje dental te ofrece una limpieza profunda, reduce la inflamación, previene la pérdida de dientes y mejora tu salud bucodental en general.

¿Duele este tratamiento?

No, el curetaje dental no es doloroso. Se realiza bajo anestesia local, por lo que el paciente no siente ninguna molestia durante el procedimiento.

En Dobleese contamos con protocolos de sedación consciente dental para intervenciones largas, complicadas o que simplemente te generan ansiedad. Por lo que podrás realizarte el tratamiento sin dolor, sin miedo y sin estrés.

Mitos y realidades sobre el dolor asociado al curetaje dental

• Mito: El curetaje dental es un procedimiento muy doloroso.
• Realidad: El curetaje dental se realiza bajo anestesia local, por lo que no es doloroso.
• Mito: Después del curetaje dental, el paciente sentirá mucho dolor.
• Realidad: Es normal sentir algunas molestias después del curetaje dental, pero estas se pueden controlar con analgésicos comunes.

¿Cómo reducir la incomodidad del tratamiento de curetaje dental?

• Comunicarse con el dentista: Es importante comunicar al dentista cualquier tipo de dolor o molestia que se sienta durante el procedimiento.
• Tomar analgésicos: Se pueden tomar analgésicos comunes antes o después del procedimiento para controlar las molestias.
• Aplicar frío: Se puede aplicar frío en la zona afectada para reducir la inflamación y el dolor.

Cuidados posteriores al tratamiento

Es importante seguir una serie de cuidados posteriores al curetaje dental para asegurar una buena recuperación. Algunos de estos cuidados son:

• Mantener una buena higiene bucodental
• Evitar fumar
• Evitar alimentos duros o pegajosos
• Utilizar un enjuague bucal antiséptico
• Realizar visitas de control al dentista

El curetaje dental es un tratamiento eficaz para combatir las enfermedades periodontales y prevenir la pérdida de dientes. Si tu dentista te ha recomendado un curetaje dental, no tengas miedo. Es un procedimiento seguro y efectivo que te ayudará a mejorar tu salud bucodental.

En Dobleese, nuestros especialistas en tratamientos de periodoncia te podrán asesorar sobre si necesitas un curetaje dental y te ofrecerán el mejor tratamiento para tu caso particular.

Nuestro objetivo es asegurar tu comodidad y satisfacción a lo largo del proceso.